Cuando te preguntas ¿Por qué es importante la ética en la Formación Profesional?, estás haciendo referencia a un aspecto fundamental en la deontología del trabajo. En este sentido, como profesional, debes tener arraigados una serie de aspectos y valores éticos que van a influir, directamente, en que los planos laboral y social estén perfectamente armonizados.
La ética profesional, en el plano de la moralidad, posibilita que un perfil profesional trabaje comprometido con la mejora de las condiciones vitales a nivel social, adoptando el compromiso y la responsabilidad que ello implica en su ejercicio profesional.
Esta condición ha de desarrollarla en la práctica profesional, pero su adecuada contribución a los valores sociales se respalda, también, con la previa adquisición de unas pautas éticas de las que ha de dotarse durante su período de formación enfocada al empleo.
¿Por qué es importante la ética en la Formación Profesional?
Partimos de la base de que el código ético debe estar presente en la vida de las personas y, por ende, en sus profesiones. Este conlleva unas premisas de justicia, equidad, honestidad, veracidad y ética laboral, que han de aplicarse como norma de responsabilidad profesional.
Para entender por qué es importante la ética en el plano profesional, es imprescindible tener presentes los valores que deben inculcarse en la formación profesional. Cada trabajador/a tiene que aplicarlos de manera individual para poder generar ventajas colectivas, ya sea en su propio empleo como en la sociedad.
Por tanto, la ética profesional debe cumplirse por voluntad de cada persona. De no ser así, el personal empleado puede enfrenarse a sanciones por incumplir las normas éticas, que simplemente abordan unas reglas de sentido común, distando de lo que puedan ser normas meramente jurídicas.
A su vez, la ética profesional está basada en una serie de principios y deberes, además de contemplar los derechos de cada trabajador/a.
¿Qué utilidad tiene la ética profesional?
Si te preguntas para qué sirve la ética profesional o deontológica, es sencillo. Determina unas pautas con las que cada persona debe actuar, en su puesto de trabajo, ante una situación concreta.
El desempeño de una labor profesional conlleva decisiones de carácter moral, por tanto, la ética profesional ha de estar presente para ejercer correctamente una profesión.
Con todo ello, la ética laboral persigue un bien común. Esto significa a que el buen uso de la moral, en el plano profesional, tiene que contribuir a que se dé un beneficio colectivo, tanto a nivel empresarial como social. Este ha de primar sobre el propio interés de cada empleado/a.
En la formación profesional, inculcar esta filosofía es útil para respetar los siguientes valores, una vez se desarrolla el trabajo profesional.
- Identificación con la organización empresarial.
- Confianza en la compañía y en el grupo de compañero/as.
- Participación en diversas tareas e implicación en resultados.
- Fomento del intercambio de ideas.
- Fidelizad empresarial.
- Transmisión de valores positivos fuera de la organización.
- Armonía con los valores generales de la sociedad.
- Generación de beneficio económico.
La Formación Profesional que te especializa como Técnico Superior en Administración y Finanzas te ofrece la oportunidad de realizar prácticas profesionales, con las que puedes tener un contacto estrecho con todos estos valores para poder aplicarlos posteriormente en tu carrera profesional.
Se trata de un Ciclo Superior teórico-práctico centrado en el que no solo puedes aprender gestión financiera y contabilidad para desenvolverte, sino también contenidos tan integradores, a nivel empresarial, como la gestión de recursos humanos, la orientación laboral y la responsabilidad social corporativa.
Por su puesto, la formación en puestos de trabajo que adquieres con esta formación profesional, puede proporcionarte una salida directa al mercado laboral del sector, con la previa adquisición de todos aquellos valores ineludibles en la ética profesional que debe desarrollarse en cualquier tipo de empresa.