Muchas personas cuando acuden a un nutricionista especialista en dietética esperan que este le resuelva el mundo con una programación de los diferentes alimentos que podrá ingerir. Sin embargo, muchos de nosotros no hacemos caso al 100% a nuestro dietista, de ahí que en muchas ocasiones nuestra dieta falle porque la combinamos con alimentos que son auténticas bombas en nuestro cuerpo. A esto se le añade el hecho de que esperamos que simplemente con la dieta todo se resuelva, pero como sabemos, una buena alimentación ha de ir acompañada del ejercicio físico prácticamente diario.
Teniendo en mente la idea de que nuestra dieta no siempre es perfecta, vamos a ver qué suelen determinar quienes más saben en dietética y nutrición como auténticos enemigos ocultos por su alto aporte calórico en nuestra dieta.
Empezamos con el alcohol, las bebidas alcohólicas suelen contener gran cantidad de calorías. Además, en muchas ocasiones las mezclamos con bebidas gaseosas azucaradas, por lo que conseguimos que estos pequeños caprichos por ejemplo en los fines de semana se conviertan en verdaderos enemigos de nuestra dieta.
Aunque es algo que conocemos generalmente, no está de más recordar que las salsas y los aderezos que podemos añadir a las ensaladas suelen tener grandes aportes calóricos que debemos evitar. La mayonesa, la salsa césar o las salsas de yogurt (dependiendo de cómo estén hechas) suelen agregar gran cantidad de calorías a nuestra alimentación y lo que se suponía ser una sana ensalada se convierte en realidad en un plato demasiado cargado.
Y ¡ojo! Los nutricionistas nos alertan, muchas personas se dejan llevar por el hecho de que un alimento sea light y en vez de comer la porción que sería normal para estar saciado, abusan de estos pensando que no les van a engordar. Pero como bien sabemos, los alimentos light tienen calorías, aunque menos que la versión normal de estos alimentos. Por lo que si abusamos de ellos, el resultado será el mismo que si comiésemos alimentos “no lights”.