El ritmo de vida que llevamos, los horarios en el trabajo o simplemente nuestra rutina personal hacen que en gran número de ocasiones comamos fuera de casa. Además de preocuparnos por comer sano, nuestros expertos en higiene bucal nos aconsejan cuidar nuestra boca y nuestros dientes después de cada comida independientemente de si comemos en casa o en un restaurante. Por eso hoy, os queremos dar una serie de consejos para cuidar vuestros dientes también fuera de casa.
En primer lugar, os recomendamos llevar un pequeño neceser con vosotros, o bien un pequeño cepillo con dentrífico. De esta manera podéis aprovechar en cualquier lavabo y dar un repaso general a vuestros dientes para eliminar aquellos restos de comida que se hayan podido quedar pegados en los dientes y encías.
Muchos expertos nos señalan que una manzana puede ser un buen sustituto al cepillado dental, de ahí que si te has olvidado el cepillo en casa o simplemente te ha dado pereza coger el neceser, puedas sustituirlo de manera esporádica por una manzana. ¿Por qué una manzana? Porque las manzanas nos ayudan a generar saliva y su textura carnosa ayuda a que nuestros dientes se limpien con el mismo roce de la manzana fresca, además nos aporta azúcares que en la mayoría de los casos combaten las bacterias de nuestra boca para generar más bacterias.
También la leche o beber agua en abundancia puede ser una buena alternativa para los días que nos hemos olvidado el cepillo de dientes. La leche hace las veces de “amortiguador” contra los ácidos en nuestra boca; y por su parte el agua equilibra el pH de nuestra boca.
Y recuerda, el chicle no puede considerarse un sustituto del cepillado, puesto que aunque aporta frescor a nuestra boca, no elimina restos de alimentos ni bacterias. Aunque si es cierto que con el chicle generamos saliva, tan importante para nuestra boca después de la comida para poder aplacar las bacterias.
Los higienistas dentales profesionales nos lo recomiendan, a donde vayamos hemos de ir acompañados por un cepillo de dientes para evitar los enemigos más comunes de nuestra salud dental.